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Comprar un piso para alquilarlo es rentable

22/01/2015

Afortunadamente no todo el mundo se ha visito gravemente afectado por la crisis. Hay personas que la han sobrellevado sin mayores sobresaltos porque su situación laboral y financiera se ha mantenido estable en los años más turbulentos. Precisamente ellos, los pequeños y medianos ahorradores son los  que están comprando pisos para ponerlos en alquiler como forma de inversión. Te lo contamos en api.cat

Las entidades bancarias han tenido que pasar por un proceso de saneamiento y reorientación de sus estrategias comerciales para corregir errores, lavar su imagen y acatar las recomendaciones del Banco de España de realizar mayores provisiones. Ahora, con el grifo del crédito más cerrado que abierto, los ahorradores han constatado que comprar un piso para ponerlo en alquiler da una mayor rentabilidad que la que ofrecen muchos de los productos financieros actuales. Veámoslo:

La rentabilidad que dan los depósitos a plazo fijo ronda el 1,5%; el interés medio abonado por el Tesoro Público en la última subasta de obligaciones a 10 años de 2014 es de 1,73%; mientras que la rentabilidad del alquiler alcanza ya el 5%, cuando en 2013 era del 4,8%. No hay un depósito bancario que alcance esta rentabilidad.

En esta línea, los datos del Ministerio de Fomento también confirman que poner ese piso vacío que tienes en Gerona en alquiler, es rentable.

Existe un indicador, llamado ‘Rentabilidad Bruta del alquiler’, que es el porcentaje que resulta de dividir la cuota anual del alquiler de la vivienda entre su precio de venta. En resumen, nos dice si merece o no merece la pena poner nuestro piso de Sabadell en alquiler.

Pues según los datos del Observatorio de Vivienda y Suelo del Ministerio de Fomento, la rentabilidad bruta del alquiler mantiene una tendencia alcista desde principios del 2010, mientras que el Índice General de Precios (IGP) de venta de vivienda libre, ha descendido un 34% en siete años y medio.

En definitiva, los expertos del sector financiero e inmobiliario constatan que quienes tienen dinero ahorrado en el banco, y no obtienen rentabilidades sustanciosas, lo sacan e invierten en comprar una vivienda para ponerla en alquiler. Si esta tendencia sigue durante el 2015, se puede prever un aumento de la oferta de viviendas en alquiler, cosa que mantendría los precios estables o los presionaría ligeramente a la baja.



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